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Caminos: Valiente

La mayoría empezamos sin saber en qué nos estamos metiendo. Algo te sacudió un día y decidiste que llenarte el pelo de aserrín, martillarte un dedo o manchar tus jeans favoritos con pintura automotriz es lo tuyo. No es drama, es proceso, y es todo lo que conoces y disfrutas en ese punto. Te cuestionas y a veces te atreves a lanzar una línea en dirección opuesta, para ver qué pasa. Y así empiezas.

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Supongo que es la naturaleza de nuestro perfil el no estar satisfecho con lo que la academia nos ofrece y explorar lo que para uno es desconocido. Se cree que nuestra generación (Millenials) somos inconformes, con la velocidad que avanzan las cosas actualmente creo que este sentir es un efecto, y aún así, no todos se adaptan.

Cuando estás en medio de algo que no controlas el miedo es regularmente inevitable. Un proyecto con un enfoque completamente distinto, vender tu primera pieza, hablar con un cliente sobre costos y tiempos, atreverte a contactar a un proveedor o distribuidor, hay cosas que no nos enseñan formalmente en la escuela. Nos dan herramientas básicas para desempeñarnos en un ámbito específico, la historia es más compleja una vez que llevas tu creatividad al mundo profesional y te enfrentas a las personas. A veces las personas son más complicadas que el mismo proyecto.

2 - Story Telling tools en DECODE 2014

Como inexpertos y de alcances desconocidos, nos permitimos ser influenciados por todo lo que nos representa éxito en nuestro rubro. Aquel conferencista que te sorprendió con su vida o sus teorías, el profesor que sabe escuchar y te aconseja o el súper estrella al que le sigues el paso desde que supiste que diseñó la “nave espacial” que está en la portada del libro Don Norman y a la que incluso homenajean.

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Se vuelven tus mentores. A veces sin haber cruzado una palabra con ellos. En lo personal acudo a distintas personas para casi cada aspecto de mi vida, pero hay algunos con los que no he hablado, sólo sé de ellos y sus efectos en mi entorno se vuelven nuestra conversación. Me atrevo a decir que ni siquiera saben de mi existencia.

4 - Animali Domestici de Andrea Branzi en la Trienale en Milán

Un mentor no es aquel que te va a solucionar las cosas de forma maravillosa, es quien te empuja a que pruebes o te cuestiones si vale la pena, jamás te obligan. A veces caminar por donde ellos lo hicieron funciona para darte cuenta de algunas cosas, pero no es sino hasta que la lección está tan dentro de ti que compruebas que les aprendiste.

¿En qué momento pasan de ser alguien a quien respetas a alguien a quien aspiras ser? Una cosa es aprender de ellos y otra es querer ser ellos. Es constante en los estudiantes idolatrar a quienes ya están posicionados, lo que dicen y hacen se vuelve ley. Incluso los ves tan alto que crees que tú no eres capaz y que ellos son extremadamente talentosos o han sido muy afortunados.

Preguntar es sano, pensar bien qué preguntar lo es aún más. Recuerdo haberle escrito hace unos años a un reconocido diseñador pidiéndole consejo sobre cómo hacer un poster de presentación para un mueble. No me juzguen, me atreví y me contestó humildemente. Su respuesta comenzó con un: “Pues creo que entiendo…”

5 - The future of Sportiness en el Simposio Internacional de Diseño Industrial de la Facultad de Arquitectura de la UANL

Una vez que descubres que están ahí porque han trabajado y se han esforzado más de lo que pensabas y no te dejas minimizar, tus posibilidades son las mismas si las sabes manejar. Seguramente no es nada sencillo salir de tu zona de confort y aventurarte a dejar de hablar de diseño para hablar de negocios o mercadotecnia. En ese momento será ideal hablar con aquel que sabes que domina el tema.

Cuando adolescente odiaba escucharlas, eran cantaletas que tintineaban y me retumbaban el cráneo, ahora son frases que extraño y me reubican cuando las escucho. Ella siempre me decía “¿Por qué no aprendes lo bueno?” y él insistía en que debía concentrarme en “hacer las cosas bien, lo demás viene sólo”. Mis primeros mentores.

Este tipo de influencias son de lo más natural. Aprovecha a quien tiene la disposición de compartir, sé inteligente al momento de preguntar y acepta de la mejora manera una crítica de quien la pides.

Les comparto el último consejo que recibí de uno de mis varios mentores. Luego de plantearle una situación totalmente nueva para mi, se limitó a decirme: “Sé valiente y diviértete.” No soy quién para aconsejar, pero los invito a ser valientes y atreverse a pedir ese consejo. La gente con experiencia sabe que se es más grande cuando se engrandece al pequeño y por eso mismo van a nuestras escuelas a compartir conocimiento y tiempo.

6 - Durante el primer Design Challenge organizado por el Centro de Innovación y Diseño de la Facultad de Arquitectura de la UANL

La intención de esta columna es que se identifiquen con estas situaciones, no podría plantear estos temas si no fuera desde mi perspectiva. Los invito a retroalimentar y compartir libremente con nosotros sus experiencias como estudiantes de Diseño. Aún sin siquiera haberse graduado ya son parte activa del gremio.

Un abrazo.

Pedro.

 

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