La silla Wassily, también conocida como silla B3, fue diseñada para la residencia de Kandinsky en Dessau por Marcel Breuer mientras era el director del taller de ebanistería de la Bauhaus.

  

Esta silla ha logrado ser una de las más reconocidas ya que por primera vez se usó tubo de acero de 20mm para su fabricación, lo que fue revolucionario para la época. Lo que se logró con la silla Wassily marcó la historia del diseño, siendo uno de los objetos más reconocibles y con mayor legado de la Bauhaus.

El diseño de esta silla surgen en 1925, pero con el paso del tiempo ha tenido algunos cambios, como lograr que la estructura fuera continua. La estructura es de acero cromado y su asiento puede ser de cuero, lona o tela, dándole al usuario un cierto espacio para la personalización.

Esta silla con más de 90 años de historia, sigue siendo un ícono elegante y se mantiene contemporáneo, lo que le ha dado el título de silla clásica, vendiendose alrededor de todo el mundo.