Percepción: Nuevas Maneras
Pase una pequeña temporada sin escribir, pero creo que el tiempo sirve también para reflexionar y darse cuenta de más detalles dentro de éste micro entorno. Durante este periodo, interactuando con varios diseñadores, clientes, y personajes varios, me percate de algo interesante. La mayoría de nosotros percibe y opina siempre sobre el trabajo de otros diseñadores refiriéndose al enfoque de lo que están haciendo, o a la técnica o material con el que están tratando, en los mejores casos. Pepe hace diseño de producto. José hace mobiliario, María hace cerámica. Así definimos (o somos definidos) fácilmente dentro de este entorno, con todos los clichés o ideas generales preestablecidas que se puedan llegar a tener. Pero es difícil darse cuenta o comprender en la mayoría de los casos que hay algo más allá del output: el cómo se llegó a él; la manera de lograrlo. No me refiero a una manera en sí como algo correcto o incorrecto, es mas bien una reflexión sobre cómo o en base a qué se idealizan ciertos resultados.
En un tiempo, la manera de diseñar de algunos diseñadores consistía (o era percibida) en experimentación hacia ciertos rubros, lo cual les valió gran parte de su reconocimiento. Algunos experimentaron más con formas (Karim Rashid), otros con procesos de transformación (Thonet), con materiales (Ron Arad), o procesos de conceptualización paramétricos (Zaha Hadid). Desde esta perspectiva, el diseño siempre ha sido el resultado de algún proceso de experimentación con algo ya establecido, impregnándose o incluso apropiándose de este proceso, pero cuyo resultado desde una perspectiva más amplia de diseño difícilmente se podía justificar. Creo que actualmente debemos enfocarnos en la manera de hacer diseño, abordándola y definiéndola desde el pensamiento.
Una manera de hacer diseño es algo un poco complejo de asimilar, porque no involucra los procesos u objetivos de siempre. Vamos, ni siquiera sé cómo poner un ejemplo claro de esto. Vemos a Benjamin Hubert, Konstantin Grcic y Hella Jongerius, por ejemplo. A pesar de que las tipologías que abordan en cada proyecto puedan parecer convencionales, nos damos cuenta de que cada proyecto lo toman de una manera poco convencional, con más pensamiento, impregnando su manera de hacer diseño, y por ello están siendo reconocidos. Y esto es trascendental, porque más allá de simplemente concebir objetos están proponiendo nuevos esquemas para generar y asimilar los mismos. Una manera de hacer diseño va más allá de un estilo, no es algo que se logre identificar justificar o ejercer fácilmente. Una nueva manera de hacer diseño involucra metodología, planeación, y ejecución. Involucra considerar ciertos aspectos como prioritarios, observar ciertas variables en el resultado. Si nos planteamos nuevas maneras de hacer y pensar las cosas, los resultados, aunque aparentemente sean los mismos de siempre, obtendrían un mayor significado.
¿Por qué empeñarnos en “diseñar” nuevos objetos que posean las mismas maneras de utilización, interacción, etc; cuando podemos pensar en nuevas maneras de diseñar los objetos de siempre?
Podría parecer que las nuevas maneras de hacer las cosas están destinadas únicamente a aquellos grandes diseñadores (extranjeros) que se pueden dar el lujo de experimentar haciéndolo, pero no, es simplemente pensar de otra manera al hacer lo que sea que estemos diseñando. En México lo vemos con Moisés Hernández y Diario, con José de la O y sus proyectos que siempre cuestionan algo. En Lo Esencial, por poner un ejemplo más cercano, tal vez nos centramos en las tipologías de accesorios más comunes, como billeteras y tarjeteros, pero abordamos el diseño desde la perspectiva de una experiencia muy interactiva. Son objetos que se usaran todos los días. ¿Cómo rediseñarlos desde cero? ¿Qué puntos débiles omitir? ¿Qué agregar? ¿Cómo mejorar la experiencia sin complicarla? Consideramos aspectos que implican que el usuario se involucre de una mejor manera con estos objetos, que interactúe más, que sean más longevos, que se tenga un mejor sabor de boca con la manera en que utilizan estos objetos tan comunes, sin que represente un valor agregado. Sólo es una manera de hacer diseño, de abordar la concepción de objetos más allá del material o el proceso.
No se necesita concentrarse en generar objetos totalmente nuevos, ni siquiera en re-interpretar los ya existentes, (cómo se podría percibir en “everything is a remix”), ni tener qué saltarnos los requerimientos del cliente. Actualmente el diseño brinda a sus actores e intérpretes muchas oportunidades, y considero una muy importante que podemos estar pasando por alto es el poder tomar las decisiones desde un principio, ser arriesgados, proponer enfoques de diseño distintos… Innovar, vaya (aunque la palabra esté siendo sobreutilizada). Pensar antes de hacer, para que el resultado sea más enriquecedor. Buscar maneras propias de hacer diseño, recurrir cada vez menos a moodboards, procesos y formas que la mayoría de las veces intentan justificar lo injustificable. Generar nuevas maneras de hacer las cosas de siempre, así los resultados serán, como mínimo, mas satisfactorios.
¿De qué manera ves/haces/interpretas/consumes diseño?