Como parte de las renovaciones que el Musee D’Orsay de Paris hizo a sus galerías, los hermanos Fernando y Humberto Campana rediseñaron el Café de l’Horloge insertando su caótico estilo brasileño en este santuario de arte impresionista. Este museo hospeda una de las colecciones de arte más importantes del mundo, con 34 Manets, 86 Monets, 43 Degas, 56 Cezannes, 81 Renoirs, 24 Van Goghs, 24 Gaugins y muchas otras obras más de este periodo. Desde hace 25 años reside en una antigua estación de trenes inaugurada en la feria mundial de 1900, por lo cual sus espacios adaptados una renovación, ampliación y reacomodo que alejara el museo de las paredes blancas y lo acercara más al colorido contexto que originalmente acompañó estas piezas.

Utilizando muebles, materiales y acabados que conocemos de proyectos previos para la compañía italiana Edra (como en su proyecto de interiorismo en el New Hotel de Atenas), los hermanos Campana crean un espacio casi de fantasía al interior del enorme reloj del edificio. El piso y las mesas de madera sólida sirven como base para los demás elementos vistosos del espacio como la pedacería metálica que da forma a las lámparas doradas y paredes azules. Otro elemento interesante del espacio son los divisores que replican el alambre de su silla Corrallo.

Aunque la nave central no fue intervenida, el museo definitivamente presentará una nueva experiencia para admirar el arte impresionista cuando re-abra sus puertas esta semana, y el café diseñado por los hermanos Campana se convertirá en una atracción más de este lugar.

Más info:
www.musee-orsay.fr