Extra-ordinario: La pluma BIC
La pluma BIC es una herramienta que se usa tanto que su diseño ha pasado inadvertido por muchos años. Estas plumas se desarrollaron en París, Francia, en 1951 y es considerado uno de los mejores inventos del siglo pasado por su simplicidad y uso diario.
La inspiración para desarrollar esta pluma vino de un periodista llamado László Bíro, cansado de tener que llenar estilografos y esperar a que la tinta secara después de escribir. El hermano de László, el químico György László, diseñó la tinta que usamos hoy en día y juntos patentaron el diseño hasta que llegó a las manos de la empresa BIC donde fue perfeccionada.
Su diseño hexagonal que evita que ruede de una mesa, y el agujero del lateral de la pluma de la pluma BIC fue uno de los cambios diseñados por Marcel Bich, que por más inútil que parezca a simple vista este último detalle, ayuda a igualar la presión atmosférica dentro y fuera de la pluma para que la tinta fluye a la perfección sin importar donde se use y de esta manera evitar los derrames.
En sus inicios, una pluma BIC llegaba a costar hasta 100 USD, pero poco a poco, gracias a los avances tecnológicos y su gran demanda, su precio se redujo hasta alcanzar su precio actual, alrededor de 30 centavos de dolar o $5 pesos mexicanos, y cuenta con una gran cantidad de marcas que le hacen competencia como Staedtler y PaperMate.
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