Extra-ordinario: el teléfono
La historia de uno de los inventos más importantes de la historia es un poco controversial, históricamente se le atribuye al escocés-norteamericano Alexander Graham Bell, pero hace poco se reconoció que realmente este producto fue concebido por Antonio Meucci, un inmigrante italiano.
Alrededor de 1857, Meucci construyó un teléfono que conectaba su oficina con su dormitorio, el cual estaba ubicado en el segundo piso, y todo esto se debió al reumatismo que padecía su esposa, pero al no tener suficientemente dinero para patentar su invento, intentó seguir con el desarrollo del mismo por medio de una empresa, y es ahí donde los materiales cayeron en manos de Alexander Graham Bell, quien presentó su versión del teléfono como invento propio en 1876.
La transmisión en un sistema telefónico se basa en el paso de un flujo de corriente a través de un circuito, siendo modificada esta corriente por lo que es el micrófono con una membrana móvil que genera ondas sonoras dependiendo de las variaciones. En un inicio las conexiones telefónicas eran meramente a base de cableado, lo que sigue vigente a nivel local, pero para las comunicaciones a larga distancia se usan los satélites artificiales como medio.
Este invento ha evolucionado exponencialmente, pasando del discado por botones, a los aparatos inalámbricos y llegando a lo que es el teléfono celular, y hay personas que afirman que dentro de unos años las líneas locales se dejarán de usar, dependiendo para comunicarnos de otro maravilloso invento, el Internet, y los satélites artificiales.