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Milan 2014: Journal 4 – Il Salone en Rho Pt2, Diseño Contemporáneo

Especificamos en el titulo “Diseño Contemporáneo” porque en la feria del mueble realmente hay todo tipo de muebles. Como comentamos ayer, una visita mal planeada te puede dejar en medio de una enorme sala de exhibición de muebles clásicos, ¡que pesadilla!

Pero nosotros íbamos preparados. Después de visitar el diseño emergente en Salone Satellite (localizado al fondo del increíble diseño arquitectónico de Fuksas), caminamos hacia los salones de muebles contemporáneos donde TODAS las marcas reconocidas por su buen diseño (y otras que no, pero pueden pagar el espacio) se pelean por la atención de los visitantes.

Tenemos que recordar que esta es una feria comercial, no una exhibición de museo. Las compañías quieren vender. Presentar nuevos productos, nuevas versiones de productos viejos y en general todo su catalogo. ¿A quien? Distribuidores, arquitectos, proyectistas, interioristas, etc. También quieren deslumbrar a la prensa, y los pabellones de cada marca son geniales para lograrlo, y si te topas un design-celebrity es la mejor ocasión para abordarlo, pero nosotros en Designaholic nos mantenemos al borde de caer al fanatismo.

Esta misma dinámica de la feria la hace menos emocionante que lo que ocurre en eventos no-oficiales en zonas como Tortona, Lambrate, Brera, etc.. pero este año vimos nuevos productos que realmente nos deslumbraron. Vimos compañías tomar riesgos con nuevos procesos o tipologías que se aventuran a nuevos territorios, también vimos como relaciones diseñador/empresa se consolidan con nuevas líneas y en general un ambiente bastante positivo y emocionante en Rho.

Nuestra primera parada en el evento fue al stand de Artifort ya que nos topamos a un buen amigo del blog, el diseñador Khodi Feiz y no podíamos desaprovechar la oportunidad de que nos explicara su nuevo diseño, el sofá “Brass”. Inspirado en como nos colocamos en un sofá y utilizamos los descansabrazos, Brass se desliga de los 90grados entre respaldo y costado para crear una nueva cara que también sirve para un acomodo más relajado en el sofá.

De Artifort nos regresamos a la entrada para comenzar en el espacio de Kartell, que este año “baño en oro” sus diseños fabricados distintivamente en plástico. Vimos muchas piezas ya bien conocidas versión dorada, y pocas piezas nuevas, entre las que destaco una silla tapizada por Patricia Urquiola que graciosamente rompía con la temática de opulencia del espacio.

Knoll, una compañía americana enfocada a los espacios de oficina también tenia un stand donde mostraba sus clásicas y contemporáneas con enfoque al hogar y contract, donde destacaba su más reciente silla en colaboración con David Adjaye en múltiples versiones.

Hella Jongerius tiene tiempo colaborando con Vitra y este año se estrenó una nueva silla que ya habíamos visto en su remodelación del lounge de las Naciones Unidas, aunque en ese momento no se comentó que sería el próximo producto para esta importante marca de mobiliario. Vitra también presentó nuevas piezas de Barber Osgerby, re-ediciones y re-coloraciones de diseños de los Eames, una nueva “concha” con descansa brazos para la colección Hal de Jasper Morrison entre otros productos.

Uno de nuestros favoritos en el blog, Konstantin Grcic presentó junto con Artek una silla que rompe con el estilo de esta compañía finlandesa definida por el legado de Alvar Aalto. Definitivamente una de nuestras piezas favoritas en la feria.

El estudio japonés de Nendo estuvo por todos lados: presentó un banquito con Emeco, una colección completa con Cappellini, una silla con Offect y de seguro muchas piezas más con otras compañías.

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Otro favorito (y también japonés), Naoto Fukasawa presentó un nuevo sofá para su familia Roundish de Maruni y una silla y banquito para Plank.

Nos encanto ver una compañía con tanta historia como Thonet con diseños nuevos (un tanto arriesgados) con el estudio Front. Una pieza menos divergente pero que nos agrado por su simpleza y manera de mantener la escencia de la compañía que nació con la tecnología de domar madera sólida a finales de los 1800’s es la silla Gustav de Gordon Guillaumier.

Magis siempre ha sido una de nuestras compañías favoritas por su apuesta a nuevos procesos y materiales, pero este año estuvimos un poco decepcionados con su colaboración con los hermanos Bouroullec. La colección de mesas Officina tienen una estructura de metal que parece haber sido soldada y trabajada en un taller de cuarta.

Algo que si nos gusto mucho en Magis fue la colección Pila por Jaime Hayon. Cómoda, colorida y divertida. También funcionó para darnos un break después de caminar tanto.

También nos gustaron las nuevas sillas Troy de Marcel Wanders que continua sorprendiéndonos por abandonar su irreverencia en sus nuevos productos. Suponemos que el señor quiere generar diseños más vendibles en contract y dejar el show a un lado. (A ver si opinamos igual la próxima semana que visitemos su primer retrospectiva en un museo).

Si había un stand que queríamos visitar con mucha ansia era Mattiazzi, una compañía que desde hacer un par de años ha colaborado con los diseñadores más reconocidos en piezas de mobiliario que empujan la madera solida a nuevas fronteras.

Siempre es un gusto ver y probar diseños en persona que hemos blogueado antes. Tal fue el caso de la silla de Bertjan Pot para Arco que nos sigue fascinando.

Siguiendo con lo más feo de la feria, vimos un par de piezas en Driade que casi nos provocan vomito, así como una colección de Zaha Hadid que parecían sus edificios convertidos en muebles.

Otra compañía nueva que realmente queríamos conocer en persona era Muuto. Ellos se autonombran los “new nordic” y realmente le dan un toque más cálido a la tradición de gran diseño en mobiliario nórdico. Accesorios, sillas, sofás, mesas, Muuto tiene de todo y no había un solo producto que no nos encantara.

Nuestro recorrido acabo en el stand más recurrido, Moroso. En medio de esta jungla de gente sentada en los muebles habían nuevos diseños por Benjamin Hubert, Raw Edges, Patricia Urquiola, Doshi Levien y la lista de estrellas podría continuar por mucho más. No se si era la hora y que ya todos estaban muertos, pero nos fue casi imposible fotografiar un mueble por si solo.

Pero entre todo ese desorden deslumbraba la silla Diatom por Ross Lovegrove, con su estilo futurista y promesa de poder ser infinitamente apilable.

La feria en Rho nos dejó muertos, pero siempre es una gran sensación sentir esa sobredosis de diseño mientras abandonas la increíble estructura de Fuksas mientras atardece.